Day Tripper(s)

El sábado pasado, sin trámites que hacer ni casas que mirar, decidimos convertirnos en turistas. Nuestra amiga Nynna se ofreció a darnos un paseo y mostrarnos un poco más de nuestro nuevo hogar.

Nos levantamos temprano y caminamos hasta la estación del metro (que ya sabemos usar) y recorrimos unas cuatro estaciones hasta llegar al centro de Medellín. Como todos los centros, no estaba tan limpio como el resto de la ciudad pero tampoco estaba mal.

Al bajar nuestra primera parada se alzaba gigante ante nosotros. El Palacio de la Cultura de Medellín. Una edificación colonial inmensa que debió haber sido la casa de alguien MUY rico, lleno de jardines, habitaciones y escaleras. Ahí, entre obras e historia, aprendimos un poco acerca de Rafael Uribe Uribe, diplomático y general de Colombia.

Palacio de la Cultura :)

Al salir de ahí nos conseguimos una plaza muy particular: la Plaza Botero, que está llena de esculturas de esos gorditos tan famosos y donde nos pudimos relajar un rato, además de probar unos de los platos más popularres de Colombia: Buñuelos y Almojábanas (o pan de bono en Venezuela). Estaban geniales, con las bebidas obligadas: Pony Malta y Postobón de Uva -Publicidad-

Estaba comenzando la tarde y el sol estaba empezando a ganarnos la batalla, así que decidimos burlarlo y cambiar el curso de nuestra misión. Next Target: MALLS!

Random Fact sobre Medellín: Hay flores y árboles en TODAS partes. La vegetación está mezclada con la arquitectura de una manera tan natural, lo que resulta muy agradable para los ojos.

Luego de pasar por San Diego, Oviedo y Santa Fe nos premiamos por un largo día con unos creppes. Y ¿de dónde más? De Creppes and Waffles. Esta comida es otro nivel, la ternera se deshace en la boca, la salsa hace que quieras comerte hasta el plato. Definitivamente fue la mejor manera de cerrar el día turístico y nos quedamos con ganas de repetir.